Muchos
estudios recientes relacionan la mala alimentación como una de las causas de
aparición de cáncer. Aquí cobra relevancia la calidad, cantidad y variedad
de alimentos que consumimos en nuestra dieta para provocar o no el
desarrollo de algunos cánceres.
En 2005,
el estudio EPIC ratificó que el consumo excesivo de carnes rojas tenía
relación con la aparición de tumores en el
colon y cáncer colorrectal.
Es sabido
por todos que una dieta rica en carnes rojas, que contienen grasas saturadas no
es saludable, y que las verduras y hortalizas serían las más saludable para
prevenir el desarrollo de tumores.
Pero los
mortales comunes nos preguntamos cómo las carnes rojas influyen el proceso
de los tumores cancerígenos, veamos la explicación a partir de algunos
estudios, que aun no son definitivas pero explican la relación:
- En el 2007, la Universidad
de Leeds ratificó a través de un estudio, que las mujeres que consumían al
día 1 ración de salchichas, cerdo o bacon, estaban más predispuestas a los
tumores de mama por la acción de las hormonas presentes en estas carnes
rojas.
- Varios estudios realizados
en los últimos años, sostienen una relación entre ciertos procesos
cancerígenos que se producen al momento de cocinar las carnes y el
desarrollo de tumores, especialmente en intestino. Las sustancias que
se activan en la cocción y son las responsables de la aparición del tumor
son la hemoglobina y la mioglobina.

Más allá
de estos datos, sabemos que cada caso de cáncer es único y debe tener su
consulta y seguimiento médico, para su correcto tratamiento.
Pero
estos datos no son desechables si los miramos como prevención y respetamos
los indicadores de la dieta equilibrada, que dicen: 3 ingestas semanales de
carnes rojas como máximo, con un consumo diario de 1 ración de vegetales u
hortalizas para una correcta alimentación.