A pesar de que existe una conciencia generalizada sobre los efectos dañinos del tabaco en la salud, en nuestro país el cáncer de pulmón tiene una incidencia de 23.211 casos al año siendo uno de los tres tipos de cáncer más habituales. Especialmente revelador es el dato que relaciona a los jóvenes con el tabaco: más de un millón de jóvenes entre 16 y 24 años (el 26%) y más de 2 millones entre 26 y 35 años (el 32,8%) fuma a diario según se desprende de la última Encuesta Europea de Salud en España del año 2009. Según los expertos, uno de cada tres consumidores de tabaco adolescente desarrollará una dependencia clínicamente relevante hasta la edad de 35 años, lo que significa aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco en la edad adulta.
Al preguntar a la población qué grado de influencia considera que los distintos factores de riesgo tienen en el desarrollo de un cáncer, el tabaco ocupa el primer lugar en importancia. En segundo lugar se sitúan el historial familiar y el contacto con sustancias nocivas o tóxicas, siendo la dieta y el tipo de alimentación los factores a los que las personas atribuyen una menor importancia. Estos datos se extraen del estudio sobre prevención y conocimiento de factores de riesgo de cáncer del OncoBarómetro, un estudio de la Asociación Española Contra el Cáncer (aecc) realizado a través del Observatorio del Cáncer aecc, que constituye la mayor encuesta en España sobre percepciones y actitudes de la población ante la enfermedad de cáncer.