Mitos Cáncer de próstata

10 mitos y conceptos erróneos sobre cáncer de próstata
Mito 1: El cáncer de Próstata es una enfermedad de hombres viejos
Si bien puede ser cierto que mientras más edad se tenga, más probabilidades existen de ser diagnosticado con cáncer de próstata (65% para 65 años o más), lo cier- to es que el 35% de los diagnosticados (más de 76.000 por año), corresponden a una edad más temprana. Aunque sólo uno de cada 10.000 hombres menores de 40 años serán diagnosticados, la tasa se dispara hasta 1 de cada 38 para las edades de 40 a 59, y 1 en 15 para edades de 60 a 69. Hay muchos factores a considerar, entre los que se incluye la raza, la historia familiar, estilo de vida y estado físico, incluso cuenta el lugar en el que vive.
Mito 2: Si no hay síntomas, no se tiene cáncer de próstata 
Falso. El cáncer de próstata es uno de los más asintomáticos cánceres en la oncología, lo que significa que no todos los hombres experimenten síntomas, los que además muchas veces son equivocados o atribuidos a otra cosa. Los signos del cáncer de próstata son frecuentemente descubiertos primero por un doctor durante un chaqueo rutinario. Los síntomas comunes incluyen una recurrente necesidad de orinar, dificultades al iniciar o terminar de orinar, débil o interrumpido flujo de la orina, dolor o ardor al orinar, dificultades al tener una erección, eyaculación dolorosa, sangre en la orina o el semen, dolor frecuente y rigidez en la espalda baja, caderas o muslos. Si se experimenta cualquiera de estos síntomas, se debe estar seguro de la necesidad de comunicárselo al médico.
Mito 3: El cáncer de próstata es de lento desarrollo,
no hay necesidad de
preocuparse
Esto es a veces cierto y a veces falso. Con los 25 tipos de cáncer
de próstata descubiertos por investigadores de la Fundación de Cáncer de Próstata, podemos confirmar que hay algunas variedades por las que un hombre podría -o no- morir, mientras que
otros son muy agresivos. Una vez que una biopsia confirma la presencia de cáncer en la próstata, el médico especifica su potencial de agresividad del informe del patólogo, pero las recomendaciones para el tratamiento dependen de muchos factores, incluyendo la edad del paciente y su estado de salud. Hay diferentes tratamientos y un enfoque no se ajusta a todos los casos. Los pacientes necesitan entender la complejidad de esta enfermedad y tomar decisiones sobre el tratamiento apropiado para cada uno junto a un médico de confianza. La buena noticia es que con el
acelerado ritmo de los descubrimientos científicos, pronto será posible identificar el cáncer específico que un paciente tiene a tiempo del diagnóstico, al igual que el más efectivo tratamiento para ello de acuerdo a su constitución biológica. Esto ayudará a curar más con menos tratamientos
Mito 4: El cáncer de próstata no se presentó en la familia, así que las posibilidades de contraerlo no son considerables.
Falso. Lo cierto es que 1 de cada 6 hombres estadounidenses será diagnosticado con cáncer de próstata en su vida, aunque en efecto, las probabilidades de un hombre con una historia familiar de cáncer de próstata se duplican a 1 de cada 3. Esto se compara con la situación de 1 de cada 8 mujeres que será diagnosticada con cáncer de mama. Los hombres afroamericanos son un 60% más propensos a desarrollar el cáncer de próstata y tienen 2,4 veces más probabilidades de morir a consecuencia de ello. La historia familiar y genética sin embargo, juega un papel importante y el riesgo es aún mayor si el cáncer se diagnostica en un miembro de la familia a una edad más joven (menos de 55 años de edad) o si el mal afectó a tres o más miembros de la familia. En el 2010, aproximadamente 218.000 nuevos casos fueron diagnosticados en los EE.UU. y más de 32.000 hombres murieron a causa de este cáncer. El número de nuevos casos en los EE.UU. podría superar los 300.000 por año para 2015.
Mito 5: El test APE (antígeno prostático específico) es una prueba de cáncer.
Falso. la prueba APE mide los niveles de antígeno prostático específico en la próstata, no el cáncer. El APE es producido por la próstata en respuesta a una serie de problemas como una inflamación o infección (prostatitis), agrandamiento de la próstata (hiperplasia prostática benigna-HPB) o posiblemente cáncer. Se debe pensar en ello como una primera alerta, una “alarma de humo” y no una “alarma de incendio”. La prueba de APE es el primer paso en el proceso de diagnóstico para el cáncer; si lo detecta, será en sus etapas iniciales, cuando es más factible combatirlo adecuadamente. Los expertos creen que la prueba de APE salva la vida de aproximadamente 1 de cada 39 hombres que se someten a ella.
Mito 6: Un nivel elevado de APE significa que hay cáncer de próstata y viceversa.
Aunque el cáncer de próstata es una causa común de elevados niveles de antígeno prostático específico, algunos hombres con cáncer de próstata tienen niveles incluso bajos de APE, el que puede ser diluido en hombres con sobrepeso u obesidad debido a su mayor
volumen de sangre. Una vez más, los niveles elevados pueden ser una indicación de otras condiciones médicas.
Mito 7: Vasectomías causan cáncer de próstata
Algunas vez se consideró que tener una vasectomía incrementaba el riesgo. Este tema ha sidocuidadosamente investigado por los investigadores y la vasectomía no ha sido relacionada en el incremento de posibilidades de un hombre para adquirir el cáncer de próstata, pero condujo a que la próstata deba ser chequeada por el urólogo más frecuentemente; consecuentemente el cáncer puede detectarse en la clínica con más frecuencia.
Mito 8: El tratamiento depróstata siempre causa impotencia e incontinencia
Aunque la disfunción eréctil y la incontinencia urinaria son posibilidades derivadas de la cirugía o la radioterapia para el cáncer de próstata, no es cierto que todos los hombres experimentan complicaciones. Estos efectos colaterales pueden depender altamente de la edad y la condición física del paciente. Numerosas terapias pueden mejorar la función eréctil y limitar la incontinencia después del tratamiento y la cirugía. Cuando se elige un cirujano, el paciente debe preguntarle sobre el porcentaje de pacientes que han tenido incontinencia y la cantidad de cirugías que ha realizado.
Mito 9: La actividad sexual incrementa el riesgo de desarrollar cáncer de próstata
La actividad sexual intensa o las eyaculaciones frecuentes fueron
en alguna ocasión acusadas de incrementar el riesgo de cáncer de próstata. En realidad algunos estudios demuestran que los hombres que reportaron eyaculaciones más
frecuentes tuvieron un bajo riesgo de desarrollarlo. La eyaculación como tal no se ha relacionado con la enfermedad.
Mito 10: Se puede pasar el cáncer a otros
El cáncer de próstata no es infeccioso o transmisible. Esto significa que no hay manera de que
se lo pueda pasar a otro.