nanopartícula de Cisplatino contra cancer de prostata

En consonancia con esta investigación, profesionales del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), han logrado encerrar en una nanopartícula al Cisplatino logrando de esta manera que el medicamento llegue a las células tumorales de la próstata sin generar efectos secundarios adversos, según se puede apreciar en un comunicado hecho público por el mismo instituto y del cual se han hecho eco distintos medios Internacionales como Physorg.com.
Utilizando la nanotecnología, los investigadores fueron capaces de reducir con éxito los tumores en ratones, empleando sólo un tercio de la cantidad de Cisplatino convencional.
Dado que las partículas se han mostrado prometedoras en animales, el equipo ahora espera ensayar con humanos el sugestivo avance.
De ser positiva la tentativa, el progreso científico podría ayudar a reducir los efectos secundarios potencialmente graves que causa el fármaco, que incluyen daño renal y daño nervioso.
“No sólo mostró una mejoría en la eficacia también disminuyó la toxicidad”, sostuvo Mansoor Amiji, presidente de las Ciencias Farmacéuticas en Bouvé Northeastern University College de Ciencias de la Salud. “Una sola nanopartícula es capaz de proporcionar mayores dosis en el paciente, lo que puede tener un resultado terapéutico mucho mejor y no preocuparse tanto por los efectos secundarios”, concluyó.
El medicamento en cuestión se llama Cisplatino. Los médicos comenzaron a utilizarlo a finales de los 70 para tratar el cáncer. Este fármaco es tan fuerte que destruye las células cancerosas al entrecruzarse con el ADN, lo que finalmente desencadena la muerte celular. A pesar de sus efectos secundarios adversos, que incluyen también daños en los nervios y náuseas, la mitad de todos los pacientes con cáncer reciben quimioterapia con este medicamento.
Otro problema con el Cisplatino es su duración relativamente corta en el torrente sanguíneo. Solamente 1% de la dosis administrada a un paciente llega al ADN de las células tumorales y aproximadamente la mitad de estas se excretan dentro de una hora de tratamiento.
Las nanopartículas circulares al estar en el torrente sanguíneo duran 24 horas, es decir, 5 veces más que el cisplatino no-encapsulado.