Los antidepresivos ayudan a aliviar el dolor de la quimioterapia

Según un nuevo estudio, el anti-depresivo duloxetina, conocido comercialmente como Cymbalta, ayudó a aliviar las sensaciones dolorosas de hormigueo causadas por la quimioterapia en el 59 por ciento de los pacientes. Este es el primer ensayo clínico para encontrar un tratamiento eficaz para el dolor.

La neuropatía periférica inducida por la quimioterapia es un efecto secundario común de ciertos medicamentos de quimioterapia.
La sensación de hormigueo - por lo general sentida en los dedos de los pies, los pies, dedos y manos - puede ser incómoda para muchos pacientes, pero para alrededor del 30 por ciento de los pacientes, es una sensación dolorosa. Estudios previos han encontrado una manera confiable para tratar este tipo de dolor.
En el estudio actual, el cual fue presentado en la Sociedad Americana de Oncología Clínica Anual, los investigadores analizaron a 231 pacientes que informaron tener neuropatía dolorosa después de recibir los medicamentos de quimioterapia oxaliplatino o paclitaxel. Los pacientes fueron asignados al azar para recibir duloxetina o placebo durante cinco semanas.
Se les pidió que informaran sobre sus niveles de dolor semanales durante todo el estudio.
Los investigadores encontraron que el 59 por ciento de los pacientes que recibieron duloxetina reportaron
una reducción del dolor, mientras que sólo el 39 por ciento de los que recibieron placebo
lo hicieron. “Estos medicamentos no funcionan en todos. La buena noticia es que funcionaron en la
mayoría de los pacientes. Tenemos que averiguar cuales son los pacientes que responden. Si podemos predecir en que pacientes funcionará, podemos apuntar el tratamiento a aquellas personas”, dijo el autor principal del estudio, Ellen M. Lavoie Smith, Ph.D., APRN, AOCN, profesor asistente en la Escuela de Enfermería de la
Universidad de Michigan e investigador en el Centro Integral del Cáncer de UM.
La duloxetina ha sido demostrada que ayuda a aliviar la neuropatía diabética dolorosa. Se cree que este tipo de antidepresivo trabaja en el dolor aumentando los neurotransmisores que interrumpen las señales de dolor al cerebro. En este estudio, los participantes recibieron media dosis de duloxetina - 30 miligramos al día - la primera semana antes del aumento gradual hasta una dosis total de 60 mg al día durante cuatro semanas adicionales. Pocos efectos secundarios graves se registraron con este enfoque. El efecto secundario
más frecuente fue la fatiga.
El tratamiento de la neuropatía periférica dolorosa es crítico porque la enfermedad puede llevar a los doctores a limitar la dosis de quimioterapia del paciente si el dolor es demasiado severo. “Además de mejorar los síntomas y la calidad de vida, el tratamiento del dolor de neuropatía periférica mejora potencialmente el tiempo de vida si se ayuda a los pacientes evitar la disminución de sus medicamentos de quimioterapia”, dice
Smith. A menudo, añade Smith, los pacientes evitan contarle a sus médicos sobre el dolor porque no quieren que su dosis de quimioterapia disminuya. “Los pacientes hacen este sacrificio: no quieren renunciar a la quimioterapia y deciden que prefieren tener este dolor.
Eso es un terrible sacrificio”, dice Smith. Los pasos de los investigadores están próximos para determinar qué pacientes tienen más probabilidades de beneficiarse de la duloxetina.
Mayor información:
www.med.umich.edu